BRAD MEHLDAU: Solo piano, Live in Tokyo (EDICIÓN JAPONESA)
- Brad Mehldau: Piano.
CD 1:
01. Intro.
02. 50 Ways To Leave Your Lover.
03. My Heart Stood Still.
04. Roses Blue.
05. Intro II.
06. Some One To Watch Over Me.
07. Things Behind The Sun.
02. 50 Ways To Leave Your Lover.
03. My Heart Stood Still.
04. Roses Blue.
05. Intro II.
06. Some One To Watch Over Me.
07. Things Behind The Sun.
CD 2:
01. C Tune, Waltz Tune.
02. From This Moment On.
03. Alfie.
04. Monk´s Dream.
05. Paranoid Android.
06. How Long Has This Been Going On.
07.River Man.
02. From This Moment On.
03. Alfie.
04. Monk´s Dream.
05. Paranoid Android.
06. How Long Has This Been Going On.
07.
Temas Edición Occidental:
Things Behind The Sun, Intro, Some One To Watch Over Me, From This Moment On, Monk´s Dream, Paranoid Android, How Long Has This Been Going On?, River Man.
NOTA: Se ha incluido la relación de temas del CD de la Edición Japonesa (en negrilla los temas que sólo aparecen en esta edición), y del CD de la Edición Occidental, para una mejor comparación de los nuevos temas.
Grabado en directo el 15 Febrero de 2003, Sumida Triphony Hall, Tokio.
JAPAN EDITION (Sin distribución en Europa) IMPORTACIÓN
Grabado en directo el 15 Febrero de 2003, Sumida Triphony Hall, Tokio.
JAPAN EDITION (Sin distribución en Europa) IMPORTACIÓN
Nonesuch Records.
WPCR-11964/5
WPCR-11964/5
2 CD 2004
Brad Mehldau, Solo piano, Live in Tokyo (Nonesuch Records, Edición Japonesa) |
No se si se podría calificar de buena o de mala noticia para los aficionados del pianista americano Brad Mehldau, el hecho de que en Japón se haya publicado el trabajo en solitario de este músico en un doble compacto, es decir, con siete temas nuevos que no aparecen en el CD Occidental.
Es bien sabido por todo aficionado a la música, con independencia del estilo musical que profese, que Japón resulta ser el paraíso para todo buen melómano (en especial de vinilos). Se puede llegar a afirmar, sin ningún tipo de duda, que la afición por la música en Japón roza los límites de la razón y de la sin razón, al profesar un amor casi reverencial por cualquier músico y estilo, lo que conlleva en muchas ocasiones que aparezcan grabaciones en tiradas limitadas o con material extra (como en el presente caso) y que para su posible adquisición se deba de recurrir a la importación directa desde el Japón, con el consiguiente dispendio económico que ello comporta (especialmente en portes). Esta circunstancia es aceptada por la gran mayoría de aficionados a la música (entre ellos los del jazz), que dirigen su mirada al país oriental, al efecto de poder adquirir estas joyas y bienes preciados que revalorizan toda buena discoteca.
En el caso de Brad Mehldau, en paralelo a la aparición en Occidente del trabajo en solitario, Live in Tokio, se publicaba en Japón un doble compacto con lo que parece ser la actuación completa del concierto ofrecido en fecha 15 de Febrero de 2003, en el Sumida Triphony Hall de Tokio. Ello ha comportado como novedad, que en vez de un único compacto, la grabación pasará a ser un doble CD con siete temas nuevos. Su portada y estilismo no ha sufrido variación alguna, sólo la adición de un nuevo compacto con más música y el consabido comentario en hoja anexa “ininteligible” en japonés.
Es por ello que al inicio de este comentario señalaba si era una buena o mala noticia la aparición de este compacto; se podría afirmar inicialmente que es una mala noticia por que su adquisición es difícil, complicada y cara para el aficionado (en la actualidad se encuentra completamente agotado) y buena por otra, por que ello nos concede la posibilidad de disfrutar, de material “extra” (temas todos ellos diferentes de los publicados) de este estupendo concierto por parte de Mehldau. La escucha de este doble compacto nos hace llegar a la conclusión definitiva que se trata de una estupenda noticia el poder disfrutar de este concierto y presumiblemente al completo, pues parece ser que este compacto no tiene visos de salir publicado por estas latitudes, tal y como ha aparecido en Japón.
En este blog se ha comentado el compacto que puede ser adquirido por todo aficionado en cualquier tienda de discos y a cuyos comentarios me remito de entrada.
Por lo que respecta a la presente edición japonesa y tras una atenta escucha, llegamos a la conclusión que los cortes que se llevaron a cabo para realizar el compacto occidental, cercenaron un concierto que se podría calificar de compensado por la música desarrollada en el mismo. La música adicional de este compacto es principalmente del gusto del pianista, música con claras influencias pop, y donde desarrolla temas de Paul Simon “50 Ways To Leave Your Lover”, de Joni Mitchell “Roses Blue”, así como standards de Rodgers y Hart “My Heart Stood Still” o de Bacharach “Alfie”, todo ello aderezado con un par de temas de autoría propia. En ellos se puede apreciar de una forma clara el aire melancólico y trágico, entremezclado con un desarrollo sencillo pero muy sentimental que confiere Mehldau a su música, todo ello estupendamente ejecutado.
La música de este compacto se muestra mucho más reflexiva y sin perder ningún ápice de profundidad y majestuosidad, consigue demostrarnos el carácter nostálgico y por momentos trágico de la música de Mehldau; así lo podemos apreciar en los primeros cortes del primer cedé “Intro”, “50 Ways To Leave Your Lover” y en especial el tema de Joni Mitchell. Se puede considerar el concierto ofrecido por la edición japonesa en su totalidad como más orgánico, compacto y más cabal. Por el contrario en el cedé occidental, los responsables de la casa discográfica han intentado escrutar el lado más espectacular del concierto, y no han dudado en elegir los cortes en donde la música es más enfática y efectiva, consiguiendo un efecto sonoro del concierto que no se corresponde con la realidad. Hay que realizar una crítica dura a estos responsables, y manifestar la más enérgica protesta por esta actuación que no presenta explicación alguna, pues la grabación podría haber aparecido en occidente en las mismas condiciones que en el mercado japonés.
El total del concierto ofrecido por Mehldau (presumiblemente en su integridad), nos ofrece un músico comprometido con su música, y ante todo un músico comprometido con su forma de entenderla y principalmente de interpretarla. Nos presenta a un músico extraordinariamente maduro, un músico que se encontró tocado por la varita de los dioses de la creación, cómodo ante la audiencia a tenor de los extensos minutos de muchos de los temas interpretados y que vació sus dosis de creación en su total amplitud y sin reparos.
La grabación japonesa del concierto de Mehldau nos brinda la posibilidad de escuchar una de las obras que con el tiempo se convertirá en pieza clave en la discografía de este sensacional pianista. Una grabación que todo buen amante a la música de de Mehldau debe de buscar y escuchar. Imprescindible para los aficionados completistas de Brad Mehldau.