sábado, 23 de junio de 2012

STAN GETZ: People Time-20 Aniversario muerte Stan Getz

STAN GETZ:
People Time

- Stan Getz: Saxo tenor.
- Kenny Barron: Piano.

CD 1:
01. East Of The Sun (and west of the moon) 9:29
02. Night And Day 8:16
03. I'm Okay 5:24
04. Like Someone In Love 8:02
05. Stablemates 8:47
06. I Remember Clifford 9:04
07. Gone With The Wind 7:12

CD 2:
01. First Song 9:55
02. (There Is) No Greater Love 8:36
03. Surrey With The Fringe On Top 9:22
04. People Time 6:14
05. Softly, As In A Morning Sunrise 7:54
06. Hush-A-Bye 9:33
07. Soul Eyes 7:32

Grabaciones en directo en el Café Montmartre, Copenhagen, los días 3, 4, 5 y 6 de 1991
Verve Records-Gitanes Jazz.
2 CD 1992

Stan Getz & Kenny Barron, People Time (Verve Records, 1992)

El 6 de Junio de 1991, hace 20 años, moría en Malibu (California), Santley Getz, uno de los mejores saxofonistas que han existido en toda la historia del jazz y al que se le conocía con el sobrenombre de “The Sound” (el sonido), por tener una de las sonoridades más bellas, cálidas y líricas. 

Stan Getz que inicialmente se encontró influenciado por el saxofonista Lester Young, de muy joven y gracias a su condición de niño prodigio, tuvo la oportunidad de tocar en algunas de las mejores big bands de los años cuarenta como la de Jack Teagarden en el año 1944, la de Stan Kenton entre los años 1944-1945, en la de Jimmy Dorsey en 1945 o con la de Benny Goodman entre los años 1945-1946. Durante los años 50, Getz se hizo muy conocido tocando al estilo cool junto a un joven Horace Silver. En 1955 editó el disco West Coast Jazz (Verve Records), grabación que tuvo una gran repercusión en el mundo del jazz, todo y que los músicos que conformaron la grabación bien poco o nada tenían que ver con ese estilo de jazz (por esa época había una lucha de estilos entre lo que se consideraba jazz proveniente del este o del oeste). Problemas de adicción a las drogas hizo que a finales de los años cincuenta afincara su residencia en Europa, para volver de nuevo a los Estados Unidos para grabar uno de sus discos favoritos según el propio Getz, Focus (Verve Records). El disco que le concedió la fama definitiva fue Jazz Samba (Verve Records), su primer álbum de "bossa-nova" y el primero grabado en ese estilo por un músico de jazz norte-americano, disco que fue llevado a cabo junto al guitarrista Charlie Byrd en 1962. El tema titulado "Jazz Samba" era una adaptación de la composición de Jobim "So Danco Samba". Con este disco Getz ganó el Grammy por la mejor interpretación de jazz en 1963 por el tema "Desafinado". Pero el auténtico bombazo a nivel musical fue el disco que Sant Getz grabó con el compositor Antonio Carlos Jobim, el guitarrista João Gilberto y su esposa, la cantante Astrud Gilberto, Getz/Gilberto (Verve Records, 1963). Su colaboración en «Garota de Ipanema» (La Chica de Ipanema) ganó un Grammy. Este tema y la música que se derivó de esa grabación se convirtieron en una música universal, en donde la sonoridad de Getz nunca se ha podido comprobar más bella y lírica. Stan Getz poseía una capacidad para la improvisación y el lirismo fuera de lo normal, y muy especialmente un fraseo en donde se combinaba el buen gusto por la melodía y la ejecución con más enjundia, así como un sentimiento inigualable tanto en los tiempos rápidos como en sus líricas y turbadoras baladas. 

Durante la época de los años 60 el grupo de Getz omite de forma voluntaria la presencia del piano, en ese grupo se descubre la interesante presencia del vibrafonista Gary Burton. Igualmente coquetea con grupos de fusión y graba con músicos de la talla de Chick Corea, Tony Williams o Stanley Clark. En el año 1964 publica su único encuentro en un estudio de grabación con el afamado pianista Bill Evans (Stan Getz & Bill Evans -Verve Records-), una grabación que no salió del todo redonda, pero con un resultado musical altamente disfrutable. 

La lista de músicos con los que ha colaborado y que han tocado con él es abrumadora, pero de todos ellos hay uno que a lo largo de los años se ha mantenido fiel a todos los proyectos y giras que ha realizado con Getz. Se trata del pianista Kenny Barron. Su colaboración con el saxofonista es en un principio de forma ocasional en el año 1984, para pasar a ser definitiva cuando en el año 1986 se convierte en miembro de pleno derecho del cuarteto de Sant Getz. Buena cantidad de proyectos y giras hacen que con el tiempo crezca entre ellos una química especial a la hora de entenderse musicalmente, y prueba de ello es el trabajo que comentamos, Stan Getz & Kenny Barron, People Time, y que sirve a modo de homenaje en el veinte aniversario de la muerte de Stan Getz

Las grabaciones que comentamos (catorce temas) proceden de las actuaciones llevadas a cabo en directo en el Café Montmartre de Copenhagen, los días 3, 4, 5 y 6 de 1991. Resultado de ello fue la publicación en el año 1992 del trabajo en dos compactos que ahora comentamos, aunque en el año 2009 apareció una caja con siete compactos con todos los pases que se llevaron a cabo durantes esos cuatro días bajo el bajo el nombre, Stan Getz & Kenny Barron, People Time-The Complete Recordings (Universal), grabaciones que los aficionados coleccionistas a los bootlegs ya hace tiempo disfrutábamos. En esta caja se recogen un total de cincuenta y un temas, material que se encuentra conformado por un repertorio a base de standars y piezas de jazz. En el año 1991 Stan Getz se encontraba gravemente enfermo a causa de un cáncer que se le detectó a mediado de los años 80. Es más, en los conciertos que se llevaron a cabo en Copenhagen, Getz y Barron cada noche tocaron a lo largo de dos pases, a excepción de la última noche, en la que tan sólo llegaron a tocar uno, y que fue debido al malestar y dolor que tenía Getz, lo que imposibilitó llevar un segundo pase, y que llevó a su definitiva cancelación. Getz y Barron llevaron a cabo un último concierto juntos en Paris, un concierto en donde Barron llegó a interpretar algunos temas solo, como consecuencia que el saxofonista se encontraba muy débil y necesitaba reposar para poder seguir con el concierto. Tras finalizar el mismo, Getz volvió a su hogar para ser tratado de su enfermedad con un tratamiento mucho más agresivo de los que hasta la fecha había llevado a cabo y le comentó a Kenny Barron que esperaba volver a iniciar una gira para el verano de ese mismo año. Esta gira que no se llevó a cabo a consecuencia de su muerte de forma definitiva el 6 de Junio de 1991.



Stan Gets & Kenny Barron, People Time-The Complete Recordings  (Universal , 2009)


People Time es uno de los mejores discos de Getz, y junto con las grabaciones al completo, un pequeño y excelente testamento musical, en donde encontramos a un saxofonista en una estupenda forma a nivel musical, todo y su débil estado de salud. A todo ello hay que añadir así mismo el formato tan difícil que escogió Stan Getz para estas grabaciones, un dúo con el pianista Kenny Barron, un formato que no permite esconderse y donde la honestidad de los músicos se percibe de forma inmediata, sin falsedades ni medias tintas. Pero si Getz se encuentra iluminado por la varita de los creadores, Kenny Barron no se queda a tras y su trabajo al piano es sencillamente portentoso, no cumpliendo tan sólo con el papel de mero acompañante, sino como un conversador de igual a igual, aportando y creando en un mismo estadio que su líder. Esta mágica comunión entre Getz y Barron hace que en estos temas (y por extensión en las grabaciones al completo), encontremos con momentos memorables y fascinantes, como por ejemplo en el tema del compositor argentino Eddie del Barrio “I´m okay” (yo estoy bien), y  que pese a su título se contraponía al estado de salud de  Stan Getz. Es increíble como un hombre en su estado de salud pueda crear tanta hermosura y pueda hacer sonar su saxo con la maestría que lo hace Getz en este tema; el instrumentos que se puede escuchar es un saxo lastimero, lleno de dolor pero de una belleza escalofriante, sobrecogedora y a flor de piel. Este tema es algo más que una mera balada, es un canto a la vida que se escapa a través de un saxo. Un tema excepcional y que literalmente pone los pelos de punta su escuha. 

Otros momentos así mismo memorables es la interpretación del clásico tema de Cole Porter “Night and Day”, o los temas de Benny Golson “Stablemates” o “I Rember Clifford”, especialmente este último, en donde nos encontramos a un saxo perfecto conocedor de la tradición, sobrio y muy elegante. También hay que resaltar la versión que lleva a cabo del tema de Charlie Haden “First Song (for Ruth)”, una ejecución en donde se mezcla delicadeza e inventiva lírica tanto por parte de Stan Getz como de Kenny Barron, lo que redunda en una soberbia lectura de este conocido tema de Haden. La verdad es que todos los temas de ambos compactos son disfrutables de principio a fin, lo que hace muy difícil resaltar uno por encima de otro, ello nos permite apreciar un producto musical que se ajusta a la perfección a las palabras que el propio Kenny Barron dejó escritas en la carpetilla del compacto: “La música en este grabación es muy especial, no sólo porque es la última grabación documentada de Stan Getz, sino también porque la música es real, honesta, pura y hermosa, a pesar del dolor o quizá debido a ella”. Sobran comentarios a estas bellas palabras. 

Los aficionados que quieran disfrutar de esta música en su totalidad pueden adquirir las grabaciones al completo que en su momento he apuntado, pero sirva como ejemplo de las mismas estos dos compactos como botón de muestra.

INFORMACIÓN ADICIONAL:
Como información adicional se acompaña link en donde puede escuchar el tema de Eddie del Barrio “I´m Okay” del disco comentado por parte de Stan Getz & Kenny Barron, People Time:


martes, 19 de junio de 2012

WEST MONTGOMERY: Echoes of Indiana Avenue

WES MONTGOMERY:
Echoes of Indiana Avenue

- Wes Montgomery: Guitarra.
- Buddy Montgomery: Piano.
- Earl Van RIper: Piano.
- Melvin Rhyne: Piano y órgano.
- Monk Montgomerry: Contrabajo.
- Mingo Jones: Contrabajo.
- Sonny Johnson: Batería.
- Paul Parker: Batería.

01. Diablo´s Dance (4:15)
02. Round Midnight (7:33)
03. Straight No Chaser (7:37)
04. Nicas´s Dream (4:58)
05. Darn That Dream (5:51)
06. Take The A Train (6:21)
07. Misty (4:32)
08. Body And Soul (4:29)
09. After Hours Blues (6:36)

Grabaciones de 1957-1957
Temas 1,2, 4 & 5, posiblemente grabadas en Indianápolis (estudio de grabación desconocido).
Temas 6-9, grabados en directo, posiblemente en el Hub Bub, Indianápolis.
Tema 3, grabado en directo, posiblemente Indianápolis.

Resonance Records.
HCD-2011
CD 2012
Edición de Lujo digipack con libreto de 24 páginas.
NOVEDAD INÉDITA.

Wes Montgomery, Echoes of Indiana Avenue (Resonance Records, 2012)

Las grabaciones de Echoes Of Indiana Avenue no tenían una información al respecto de su grabación. Debido a esto, nunca podremos estar seguros al 100% de la historia de estas cintas de verdad. Hemos hecho nuestros mejores esfuerzos para identificar correctamente a los músicos, lugares y años, incluso hablando con varios músicos, académicos y expertos. Una cosa es cierta... estas son algunas de las grabaciones más tempranas y con más swing de Wes Montgomery!”. Esta es la nota del productor Zev Feldman con la que nos encontramos al abrir la carpetilla del libreto de 24 páginas con que se acompaña el presente compacto.

Echoes of Indiana Avenue documenta nueve grabaciones de origen indocumentado (de las cuales cinco son en directo). Grabaciones que eran desconocidas hasta que el año 2008 el productor Michael Cuscuna tuvo conocimiento que a través de eBay se vendían unas cintas de grabación con música de Wes Montgomery. En el verano de 2010 Cuscuna mencionó la existencia de este material a George Klabin y Zev Feldman. Klabin y Feldman juntaron fuerzas en el impulso del sello discográfico Resonance Records que tenía como principal finalidad, adquirir material musical histórico inédito y no publicado con anterioridad. Sin duda alguna estas grabaciones entraban dentro de estos parámetros, lo que llevó que al final fueron adquiridas, para ser conocidas por el mundo jazzístico.

La importancia de estas grabaciones que parece ser que se encuentran fechadas entre los años 1957 y 1958 (algunas incluso se consideran que fueron demos que se presentaron a compañías discográficas), radican a que las mismas pertenecen a la época en donde Wes Montgomery y sus hermanos empezaron a llevar a cabo sesiones de grabación para el sello discográfico Pacific Jazz con el nombre de “The Montgomery Brothers”. A partir de las mismas, Wes Montgomery devino una estrella del jazz en su instrumento, tanto en solitario como en la agrupación junto a sus hermanos. 

Echoes of Indiana Avenue presenta una calidad de sonido perfecta que permitirá al aficionado disfrutar en todo su esplendor de todos los temas, tanto los de estudio como los grabados en directo. El repertorio que aparece en estas grabaciones se encuentra repleto de baladas y standards, entre ellos “Round Midnight”, un tema que formará parte del repertorio del guitarrista a lo largo de su carrera; un “Straight No Chaser”; una magnífica versión de “Take The A Train”; o una deliciosa transcripción de “Body And Soul”. Una de los mejores interpretaciones de este compacto es el tema con que se cierra el compacto, “After Hours Blues”, un tórrido y trepidante blues que es ejecutado de una forma extraordinariamente musculosa, con un Wes Montgomery pletórico y muy brillante.

Apuntar así mismo en relación a esta grabación, la cuidada y esmerada edición que Resonance Records ha puesto en la publicación. Un edición de lujo en digipack; un libreto con 24 páginas en donde aparecen fotos familiares provenientes de la familia Montgomery así como de la ciudad de Indianápolis; notas detallas a cargo de Dan Morgenstern, David N. Baker, Bill Milkowski, Michael Cuscuna o de músicos como Pat Martinio; así como una entrevista con el hermano de Wes Montgomery, Monk, del año 1980. Por si esto ni fuera poco para los más acérrimos coleccionistas se ha publicado una edición limitada de dos vinilos de 180 gr. a 45rpm, para los que quieran disfrutar de esta música de una forma diferente al compacto.

Sin duda alguna, una excelente grabación que nos proporciona material inédito de unos de los más grandes guitarristas de toda la historia del jazz.


jueves, 14 de junio de 2012

MILES DAVIS: Miles Davis Quintet Live in Europe 1967-The Bootleg Series Vol.1

MILES DAVIS:
Miles Davis Quintet Live in Europe 1967-The Bootleg Series Vol.1

CD 1:
Grabado el 10/28/67 en el Konigin Elizabethzaal, Antwerp, Bélgica.
1. Agitation 5:27
2. Footprints 9:37
3. Round Midnight 7:38
4. No Blues 11:15
5. Riot 3:40
6. On Green Dolphin Street 8:26
7. Masqualero 8:54
8. Gingerbread Boy 5:56
9. The Theme 1:16

CD 2: 
Temas 1-5 grabados el 11/2/67 en Tivoli Gardens, Copenhagen, Dinamarca.
1. Agitation"   Tivoli Gardens 6:14
2. Footprints"   Tivoli Gardens 9:01
3. Round Midnight"   Tivoli Gardens 7:16
4. No Blues"   Tivoli Gardens 14:40
5. Masqualero"   Tivoli Gardens 10:00

Temas 6-7 grabados el 11/6/67 en el Paris Jazz Festival, Sala Pleyel, Paris, Francia.
6. Agitation 6:36
7. Footprints 10:35

CD 3: 
Grabados el 11/6/67 en el 11/6/67 en el Paris Jazz Festival, Sala Pleyel, Paris, Francia. 
1. Round Midnight 8:06
2. No Blues 13:01
3. Masqualero 10:08
4. I Fall in Love Too Easily 10:34
5. Riot 3:39
6. Walkin 9:01
7. On Green Dolphin Street 9:04
8. The Theme 8:22

CD 4-DVD
Temas 1-5 grabados el 11/7/67 en el Stadthalle, Karlsruhe, Alemania.
1. Agitation 6:43
2. Footprints 6:03
3. I Fall In Love Too Easily 11:34
4. Gingerbread Boy 5:34
5. The Theme 0:28

Músicos:
- Miles Davis: Trompeta.
- Wayne Shorter: Saxo tenor.
- Herbie Hancock: Piano.
- Ron Carter: Contrabajo.
- Tony Williams: Batería.

Sony Music/Legacy
3 CD + 1 DVD 2011

Miles Davis Quintet, Live in Europe 1967: The Booleg Series Vol. 1 (Sony Music/Legacy, 2011)


Ya en su autobiografía (DAVIS, Miles & TROUPE, Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, ISBN 84-406-1975-8; reeditada en una encuadernación rústica con idéntica traducción, en la editorial barcelonesa Alba Editorial), Miles Davis profecitó que tras su muerte se publicaría música inédita de sus formaciones, pues en los anaqueles de la compañía discográfica Columbia (hoy perteneciente a Sony Music) existían un buen numero de grabaciones durmiendo el sueño eterno. Ha llovido mucho desde que se publicasen esas palabras y el tiempo han venido a demostrar con hechos lo que señalaba el propio músico. Ello ha sido como consecuencia que la figura del trompetista Miles Davis ha sido objeto de todo tipo de negocio, comenzando por las reiteradas y constantes reediciones de toda su carrera discográfica hasta la publicación de todo tipo de material inédito en cualquier formato y en infinidad de sellos discográficos de diferente condición y pelaje. El “mercado” de bootlegs (material de coleccionista) siempre ha tenido un fuerte interés en sacar a la luz cualquier tipo de grabación en directo del trompetista, en ocasiones con una pesa calidad auditiva que tan sólo los más fanáticos e incondicionales seguidores son capaces de escuchar, aunque en otras con una calidad dignas del mejor sello discográfico. Todo ello ha posibilitado de alguna forma tener una amplia información de la mayoría de conciertos que Miles Davis dio a lo largo de su extensa carrera musical.

Con la aparición del reciente cofre de tres CD y un DVD (y para los coleccionistas una caja de cinco elepés) Live in Europe 1967: The Bootleg Series Vol.1 (contradictorio título pues el término bootleg choca por definición con una publicación oficial), se ha querido dar a conocer unos conciertos y una música (algunos de ellos ya aparecidos en verdaderos bootlegs, en concreto el concierto de Antwerp y parte del de Paris) referente a uno de los periodos creativos más importantes de Miles Davis, en concreto al que se denominó “el segundo quinteto de Miles Davis”.

Segundo quinteto de Miles Davis

Estos registros que aquí comentamos (musicales y audiovisuales) tienen todos ellos una procedencia y una historia muy concreta. Nos encontramos en el año 1967, en palabras de Miles Davis, “por aquella época, este país andaba revuelto. Todo estaba confuso: la música, la política, las relaciones raciales, todo. Nadie parecía saber en qué sentido marchaban las cosas; todo quisque parecía desorientado, y no digamos el batallón de músicos y artistas que de pronto creían tener más libertad de la que nunca tuvieron para hacer lo que les apeteciese. La muerte de Trane añadió una fuerte dosis de confusión al pensamiento ya poco claro de muchas personas.(DAVIS, Miles & TROUPE; Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, pag. 290, ISBN 84-406-1975-8). A finales de ese año el promotor y productor George Wein (fundador de uno de los festivales más prestigiosos en Estados Unidos, el Newport Jazz Festival) tuvo la idea de desarrollar y exportar la fórmula en que se realizaba el mencionado festival a Europa llevando a cabo para ello una serie de giras en diversas ciudades y con un buen nutrido elenco de músicos y de diferentes estilos musicales. Esta idea cuajo de forma definitiva a finales del año 1967 gracias al sponsor de la Pan American Airlines y la U.S. Travel Service (una agencia gubernamental), lo que conllevó una gira itinerante de ocho bandas para actuar en lugares como Antwerp, Belfast, Londres, Rotterdam, Estocolmo, Berlín, Paris y Barcelona (concierto éste en donde Miles Davis no llegó a actuar a consecuencia de las diferencias económicas que tuvo con George Wein, lo que provocó la  espantada del trompetista, actuando tan sólo el grupo de Miles Davis en formato de cuarteto en la ciudad condal). Esta gira se denominó “Newport Jazz Festival en Europa”, y en ella se encontraba el grupo de Miles Davis, “dediqué el resto del año 1967 a una gira por Estados Unidos, seguida de otra por Europa. Esta última fue muy larga. Nos incorporamos a un espectáculo organizado por George Wein, al que llamó <<Newport Jazz Festival en Europa” (DAVIS, Miles & TROUPE; Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, pag. 291, ISBN 84-406-1975-8).

Las grabaciones de este cofre por sí sólo constituyen todo un acontecimiento musical de extraordinaria importancia, a consecuencia de la escasa existencia de grabaciones en directo del grupo de Miles Davis en esas fechas, y muy especialmente por la reunión de talentos que una vez más había conseguido reunir en una formación musical el trompetista. Un grupo que se le llegó a considerar una de la máquinas musicales más perfectas por esos tiempos en el mundo del jazz, el conocido como “el segundo quinteto de Miles Davis”, una formación que todo buen aficionado se saber de corrido: Miles Davis a la trompeta, Wayne Shorter al saxo tenor, Herbie Hancock al piano, Ron Carter al contrabajo y Tony Williams a la batería. Una formación que se acabó de establecer con la presencia de Wayne Shorter tras la gira que el grupo de Miles Davis (en donde constaba Sam Rivers al saxo tenor) llevó a cabo por Japón en el año 1964. Las actuaciones con Sam Rivers fueron ciertamente exitosas, pero las relaciones entre Miles y el saxofonista no era del todo fluidas. Sam Rivers abandonó el quinteto tan pronto como el grupo regresó a los Estados Unidos de la mencionada gira, y para su sustitución Miles Davis fichó finalmente al saxo tenor que quería para su grupo: Wayne Shorter, que por aquellas fechas había dejado la dirección de los Jazz Messengers de Art Blakey, uniéndose al quinteto para un concierto en el Hollywood Bowl el 4 de septiembre de 1964.

Con este segundo quinteto, Miles Davis llegó a publicar cinco magistrales discos: E.S.P., Miles Smiles, Sorcerer, Nefertiti y Miles In The Sky, todos ellos punto de partida y camino a seguir dentro del más moderno jazz que desarrolló Miles Davis. Culpa de todo ello fue consecuencia de la presencia de Wayner Shorter; su incorporación al grupo de Miles Davis significó un profundo y radical cambio en la música del trompetista, aunque también deberíamos de mencionar la aportación musical del baterista Tony Williams a consecuencia de su estilo agresivo, nervioso y altamente poli-rítmico, así como muy percusivo especialmente en el uso de los platos. La opinión a cerca de Tony Williams era bien clara, muy “a lo Miles Davis”: “Nunca hubo nadie como él antes, ni lo ha habido después. Es el perfecto hijoputa” (DAVIS, Miles & TROUPE; Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, pag. 278, ISBN 84-406-1975-8)




Fue la aportación de Shorter la que permitió abrir las estructuras sonoras de la formación de Miles Davis a nuevos y desconocidos caminos hasta la fecha. Esta aportación musical conllevo de forma irremediable una comparación con John Coltrane (saxofonista que estuvo en el grupo de Davis, y que fue artífice del primer gran quinteto del trompetista en los años 50). Shorter era un saxofonista que se encontraba bajo los influjos de la música de Coltrane, pero a pesar de ello se arrogaba una voz propia y distintiva, su saxofonismo no era tan mordaz ni vehemente como la de Coltrane, que por momentos era desbocado. Shorter tenía una voz en donde mezclaba libertad y creatividad a partes iguales. Davis con respecto a su grupo señaló: “en aquella banda yo era la inspiración, digamos que la sapiencia y el nexo de unión entre todos. Tony era el fuego, la chispa creativa; Wayne era el hombre de las ideas, y Ron y Herbie eran el soporte” (DAVIS, Miles & TROUPE; Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, pag. 277, ISBN 84-406-1975-8). Estas palabras ponen de manifiesto una de la cualidades que Miles Davis ha sabido explotar a lo largo de su carrera hasta sus últimos consecuencias, la de saberse rodear de los mejores talentos musicales que podía encontrar.

Shorter así mismo aportó una buena cantidad de nuevos temas al grupo, lo que permitió a Miles Davis apartarse del repertorio que por esas fechas estaba llevando a cabo, a base de standars y composiciones orquestales. Temas como “Agitation”, “Footprints”, “Masqualero” y “Riot” permiten comprobar la apertura musical comentada hasta el punto de descubrir algunos elementos provenientes del free jazz, estilo que Davis criticó negativamente de forma pública y notoria. Del mismo Archie Shepp el trompetista señala en su autobiografía que: “Yo toque incluso con Archie [se refiere a Shepp y también a la gira por Europa en 1967] un par de veces, porque Tony Williams me lo pidió, pero no llegué a entender lo que él tocaba” (DAVIS, Miles & TROUPE; Quincy, Miles, La Autobiografía; Gubern, Jordi (trad.). 1ª edición Barcelona: Ediciones B, 1991, pag. 291, ISBN 84-406-1975-8). La formación en estas actuaciones que comentamos se percibe perfectamente cohesionado, con un sonido integrado como grupo, configurado por momentos en grandes dosis de melodía pero con un sentido rítmico apabullante y vigoroso, en donde todos los componentes se compenetran a la perfección, incluso en los momentos en que cada músico lleva a cabo sus respectivos solos. Ello da una perfecta idea de la identificación y homogeneidad que como grupo detentaban a nivel musical el segundo quinteto de Miles Davis.

La calidad de las grabaciones de este cofre es excepcional pues procede de las cadenas de la radiotelevisión belga, danesa, francesa, alemana y sueca. Los aficionados podrán disfrutar en toda su extensión estas grabaciones, y muy particularmente el DVD que se acompaña en el cofre, dos actuaciones provenientes de sendas actuaciones en Karlsruhe (Alemania) y Estocolmo (Suecia), lo que permitirá percibir la extraordinaria química que destila el grupo en los conciertos.

No cabe señalar que se trata de un disco imprescindible para los seguidores de Miles Davis y merecedor de encontrarse en las mejores discotecas de jazz.

domingo, 10 de junio de 2012

LIBRO: MÚSICA PARA LEER: My Favorite Things-Conversaciones con John Coltrane

LIBRO: MÚSICA PARA LEER:
My Favorite Things-Conversaciones con John Coltrane
                                        
Edición de Michel Delorme.
Trasucción de Isabel Muñoz.
108 Páginas.
Publicado por Alpha Decay-Alpha Mini.
Cápsulas literarias portátiles de lectura instantánea.
Mayo 2012
ISBN: 978-84-92837-50-2.

Contenido:

- Nota del Editor.
- Introducción de Michel Delorme.
- Entrevista con John Coltrane (1962).
- Hacía la composición (1963).
- “No puedo llegar más lejos” (1965).
- Carta a Don DeMichael.



Después de escuchar de forma repetida este álbum [el disco Coltrane, publicado en el año 1962 por Impulse]. Siento que cualquier comentario aquí sería innecesario. Después de todo, John Coltrane y sus músicos tienen algo que decir musicalmente y los verdaderos amantes del jazz entenderán la música sin necesidad de ninguna explicación”. Con estas palabras se refería Bob Thiele, productor de las sesiones de grabación para el disco Coltrane, y que aparecían para acompañar a los temas que Coltrane y su cuarteto llevaron a cabo en el año 1962.

Palabras y pensamientos muy similares encontramos en el libro My Favorite Things-Conversaciones con John Coltrane en la nota del editor, cuando señala la anécdota del crítico Nat Hentoff al tener que llevar a cabo unas notas para la funda de un disco de  Coltrane: “Al principio, Coltrane era reticente a hablar de su música. Lo llamé y le dije que me habían pedido que escribiera un texto para la funda de uno de sus nuevos discos. Él me respondió: <<Espero que te hayas negado. Si la música no se sostiene por sí misma, ¿de qué sirve?>>, y como una nueva etapa en un ritual, yo le dije: <<Pero, John, es mi trabajo>>, y entonces él, que es un buen tipo aceptó: <<De acuerdo, ¿qué quieres saber?>>”. Tal y como se puede comprobar el propio Coltrane era parco a la hora de hablar de música, debido a que él era música y lo demostraba de forma sobrada en sus largos y ardientes solos que llevaba a cabo en sus actuaciones.

Estas son algunas de las reflexiones que podemos encontrar en el libro publicado por la editorial barcelonesa Alpha Decay, My Favorite Things-Conversaciones con John Coltrane (título por cierto muy desafortunado con respecto al original “Je pars d´un point et je vais le plus loin possible”, que se refiere a la propia afirmación de Coltrane “es simplemente en el transcurso de mis improvisaciones cuando intento aventurarme lo más lejos posible” (página 60). El libro recoge tres entrevistas que llevó a cabo el periodista de jazz Michel Delorme aprovechando la presencia de Coltrane en Francia. Estas entrevistas se realizaron con la colaboración de Jean Clouzet en 1962 (Entrevista con John Coltrane) para la publicación Les Cahiers du Jazz, aunque editada el nº 8 del 4º trimestre de 1963; y de Claude Lenissois (“No puedo llegar más lejos”) en 1965 para la revista Jazz Hot en su nº 212, septiembre de ese mismo año. La entrevista “Hacía la composición” también fue publicada en la revista Jazz Hot. Así mismo, se acompaña una carta firmada por John Coltrane en 1962 y dirigida a Don DeMichael, director en aquellas fechas de la afamada revista Down Beat.

La lectura de este libro en formato “mini” (10,5 x 10), más pequeño que los autodenominados libros de bolsillo, hará las delicias de los aficionados y seguidores de Coltrane, aunque también sabrá a poco, a consecuencia que el mismo se lee en un espacio de tiempo muy corto. Pero a pesar de todo ello servirá para conocer la opinión de Coltrane en unos años importantes en su labor creativa, años 1962 a 1965. Se podrá obtener conocimiento de la opinión que Coltrane tenía a cerca del paso de Eric Dolphy por su grupo “Él era perfecto. Es el único solista que me ha satisfecho por completo” (pag. 42), así como el desarrollo de figuras de la talla de Ornette Coleman. Opiniones respecto a la larga duración de sus solos, “Mi forma de tocar se pliega difícilmente a las limitaciones de tiempo. Mis ideas deben desarrollarse naturalmente en un largo solo. No puedo hacer gran cosa respecto a eso; hay que aceptarlo.” (pag. 44)

También será posible encontrar entre otras opiniones respecto a la elección del instrumento para tocar, si saxo tenor o soprano, la posibilidad de hacer un disco con cuerdas, o la posibilidad de tocar con dos contrabajistas o de su preocupación por la composición de nuevos temas para su cuarteto. Pero llama muy especialmente la atención la opinión de Coltrane respecto al tema de porque en su grupo todos los integrantes del mismo eran de color, “A mi modo de ver, ese problema de sensibilidades enfrentadas [en referencia a si una sensibilidad blanca sería incapaz de adaptarse a la forma musical de Coltrane] no es una cuestión de razas, sino que tiene que ver con los individuos. No conozco los criterios susceptibles de diferenciar a un músico blanco de un músico negro; tampoco creo que existan. Si un hombre conoce bien su instrumento, si siente el género de cosas que hacemos y le gusta nuestra música, no hay más problema y podrá tocar con nosotros sin dificultad” (págs 46 y 47). Sin duda alguna toda una declaración de intenciones.

Un pequeño gran libro que se recomienda y que no debería pasar desapercibido, y que aporta pensamientos de uno de los músicos más relevantes de la historia del jazz.

miércoles, 6 de junio de 2012

CARLA BLEY: The Lost Chords find Paolo Fresu

CARLA BLEY: The Lost Chords find Paolo Fresu

- Paolo Fresu: Trompeta y fiscorno.
- Andy Sheppard: Saxo soprano y tenor.
- Carla Bley: Piano.
- Steve Swallow: Contrabajo.
- Billy Drummond: Batería.

The Banana Quintet:
1)       One Banana (8:31)
2)       Two Banana (6:37)
3)       Three Banana (3:50)
4)       Four (4:51)
5)       Five Banana (7:51)
6)       One Banana More (1:23)
7)       Liver of Live (7:13)
8)       Death of Superman/Dream Sequence # 1-Flying (7:50)
9)       Ad Infinitum (7:42)

Todos los temas compuestos por Carla Bley.

Grabado el 19/20 Mayo 2007
WATT (ECM) 34
1737750

Carla Bely, The Lost Chords find PAOLO FRESU  (Watt/ECM Records)

En el año 2004 apareció en el sello discográfico WATT el trabajo de Carla Bley en formato de cuarteto titulado “The Lost Chords”, y entre los componentes del mismo figuraban músicos de la talla de Andy Sheppard al saxo soprano y saxo tenor, Carla Bley al piano, Steve Swallow al contrabajo y Billy Drummond a la batería. Esta misma formación pero con la presencia añadida del trompetista italiano Paolo Fresu proporcionó la grabación The Lost Chords find Paolo Fresu que ahora se comenta. Con motivo de la inclusión de este músico invitado, Carla Bley ideó y dispuso de un quinteto de extraordinaria relevancia y de elevadas prestaciones musicales.

La aportación de Fresu es significativa a lo largo de toda la grabación, muy especialmente en los temas a medio tempo y baladas, en donde el trompetista italiano es todo un maestro, tanto por la belleza que despliega su trompeta y fiscorno, como por la sobriedad en la utilización de las notas musicales, y muy especialmente por la claridad y belleza de su fraseo. Junto a Fresu hay que resaltar la contribución musical del saxofonista británico Andy Sheppard, que logra una perfecta conexión-comunicación con Paolo Fresu, y que provoca momentos de gran enjundia musical, muy especialmente en la Suite The Banana Quintet.

Junto con Fresu y Sheppard hay que señalar, que la sección rítmica no sólo sirve de soporte para los desarrollos musicales del trompetista y el saxofonista, sino que se consideran piezas de un grupo que ejecuta la música de Carla Bley con extraordinaria primor y transparencia. Dentro de este grupo sobresale con especial interés las aportaciones armónicas de Carla Bley, que sirven para añadir una paleta musical muy precisa para que los solistas y el grupo como conjunto funcionen como una máquina de precisión suiza. El resultado de todo ello, provoca una música extraordinariamente bella, que deberá de ser deleitada sin prisa y prestando una gran atención. Un gran disco.

Foto de Paolo Fresu (Copyright de Joan Carles Abelenda)